¿Podemos frenar el avance de las enfermedades crónicas cardiovasculares?

Categorías : Manten tu línea , Sistema Cardiovascular

Año tras año, y desde 1993, las enfermedades crónicas han crecido en España en número de personas afectadas, según la Encuesta Nacional de Salud con datos correspondientes a 2017. Un ejemplo esclarecedor de esta tendencia al alza es el del colesterol alto, cuya prevalencia se ha doblado durante este período al pasar del 8,2% al 17,9%. Algo parecido ha ocurrido con la diabetes, que ahora afecta al 7,8% de los españoles, cuando hace veintiséis años su presencia solo era del 4,1%.

Junto a estas dos patologías, las enfermedades crónicas más habituales en España son la hipertensión arterial, que afecta a dos de cada diez personas, y la obesidad, con un 17,4% de prevalencia. Ambas tienen un efecto pernicioso en la salud cardiovascular.

Además, cerca del 4% de la población es pluripatológica. Teniendo en cuenta esta realidad, no es de extrañar que el 80% de las consultas de atención primaria y el 60% de ingresos hospitalarios estén motivados por estos problemas de salud, tal y como recoge la Organización Médica Colegial de España.

¿Por qué somos, cada vez más, enfermos crónicos? Hay muchas causas que explican esta tendencia al alza. Algunas se pueden considerar positivas: estamos hablando del aumento de la esperanza de vida y el consiguiente envejecimiento de la población, así como las mejoras sanitarias, que han permitido cronificar enfermedades como la insuficiencia cardiaca, la diabetes o el cáncer. Estos avances han coincidido, no obstante, con hábitos de vida cada vez más sedentarios, con la falta de ejercicio físico, el estrés y el consumo de alimentos procesados y de dietas poco equilibradas como principales señales de que no estamos haciendo todo lo que deberíamos por nuestra salud.

El hecho de que las enfermedades crónicas sean de larga duración y de progresión lenta y que, en cierto modo, nos estemos acostumbrando a convivir con ellas durante muchos años, no debe hacernos perder de vista su peligrosidad, ya que son una de las causas de muerte más comunes.

Por todos estos motivos, evitar y mantener a raya las enfermedades crónicas pasa por la detección precoz y, claro está, por mantener hábitos de vida saludables, dominados por el ejercicio físico moderado y una dieta en la que predominen alimentos de origen vegetal, seguidos, de mayor a menor frecuencia, por lácteos fermentados y pescado, carne preferentemente blanca y huevos. En el caso de que la enfermedad crónica ya se haya diagnosticado, la necesidad de seguir unos hábitos de vida saludables bajo supervisión médica se vuelve acuciante.

Tanto cuando se trata de evitar enfermedades crónicas como cuando tu deseo es mantener el bienestar y un estilo de vida acorde con tus intereses aunque padezcas una patología de larga duración, los complementos alimenticios pueden ser el impulso que te ayude a encontrarte definitivamente bien.

Desde 1983, en Dimefar nos hemos especializado en multitud de complementos alimenticios que te ayudan a reforzar tu salud de una forma natural, para que saques el máximo partido al potencial de tu mente y tu cuerpo. Entre nuestro catálogo de productos naturales encontrarás suplementos como Decol Forte, basado en levadura roja de arroz y coenzima Q10, que contribuyen a mantener niveles normales de colesterol en sangre. En paralelo, la combinación de una infusión Santa Flora nº9 ADEL (con sen, frángula, anís, hinojo, aquilea, grama y fucus) y de ácido linoleico conjugado (Tonadim CLA) te ayudarán a controlar el peso.

Si necesitas que te asesoremos sobre cómo alcanzar un estado óptimo de salud de forma natural, contáctanos.