Aunque para nosotros ahora es habitual encontrar melisa entre nuestras infusiones, sus propiedades se conocen desde hace centenares de años. La melisa es un extraordinario remedio natural que nos ayuda a paliar diferentes enfermedades y dolores, como los problemas de insomnio, digestivos o de nervios. A continuación te dejamos cuatro de los beneficios de esta planta:
Al ser una planta digestiva, facilita las digestiones pesadas, ayudando a evitar la formación de gases y el mal aliento y a eliminar las náuseas o mareos matutinos asociados con la digestión.
- Como muchas de las hierbas de su misma categoría, la melisa tiene muchos antioxidantes naturales que ayudan a conseguir una buena salud y belleza.
- Las propiedades antivirales y antisépticas de esta planta ayudan a mejorar en el tratamiento de herpes labiales y a combatir el virus que lo provoca.
- El efecto relajante de esta planta mejora la conciliación del sueño, relajando el sistema nervioso, con lo que una infusión de melisa antes de ir a dormir va a aumentar la calidad de éste, haciendo que nos levantemos de mejor humor y con más energía.
Las múltiples propiedades de la melisa la convierten en una planta imprescindible y gran aliada para nosotros. Se puede tomar en infusión, que combina a la perfección con miel, limón, azúcar o jengibre. Sin embargo, la forma más sencilla y cómoda de consumirla es en cápsulas, ya que en una sola dosis podemos obtener los beneficios de la melisa.
Otros usos: Puedes utilizar hojas frescas de melisa sobre heridas, llagas rasguños y picaduras para mejorar y acelerar la cicatrización.